¿Qué sería de nuestras ciudades sin un plan de crecimiento y expansión?, no tenemos la respuesta exacta, pero inferimos que habría un cierto tipo de caos, que la calidad de vida sería menor y que la situación económica no iría tan bien, esto es parte de la respuesta del porqué existe un Plan de Desarrollo Urbano, que en sí es un documento técnico donde se plasman las previsiones para la organización y el crecimiento futuro de una ciudad, para ello se implementan normativas y regulaciones con la finalidad de lograr un desarrollo urbano sostenible y así proveer a los ciudadanos de un ambiente seguro, saludable, confortable y que en el proceso se respete el medio ambiente y la cultura prevalente del lugar.
Así pues, entendemos que tener un plan para el crecimiento de una ciudad es esencial y hasta cierto punto obligatorio, si no qué sería de la organización territorial, entre las normativas o regulaciones que disponen las autoridades para lograr este fin se encuentran trámites necesarios para comenzar con un negocio, uno de ellos es el uso de suelo, que como su nombre lo dice, es el documento donde se especifica para qué será utilizado un inmueble, lo que tiene todo que ver con el desarrollo urbano, pues existen ciertas zonas de las ciudades donde solo se permite edificaciones para uso habitacional o en otros caso comercial, partiendo de ahí, no se puede disponer de una construcción a nuestro parecer sin antes consultar con la autoridad. Con esto nos damos cuenta que el desarrollo urbano lo hacemos todos, que contribuimos con nuestras acciones a lograr ese plan que tiene el gobierno, por supuesto que dichas previsiones están basadas en proyecciones y análisis pertinentes que brindan luz a quienes las diseñan para tomar las mejores decisiones y tener un mejor entorno en el cual vivir.
Dentro de los aspectos que se consideran en este plan están las vialidades, el transporte, la infraestructura eléctrica, hidráulica, sanitaria, el desarrollo económico, conservación del medio ambiente, organización territorial, entre otros que contribuyen a considerar plazos y los recursos requeridos para que se pueda ejecutar. Para su diseño y aplicación también se debe considerar el crecimiento demográfico, que es lo que marca la pauta de lo que requiere una ciudad para abastecer de las necesidades básicas a sus ciudadanos, así como procurar los derechos universales como salud, educación y esparcimiento.
Los planes de desarrollo urbano contribuyen entonces, a prever requerimientos y normativas que las ciudades necesitarán en un futuro, identificar problemas y proponer soluciones urbanas y territoriales, aprovechar de forma eficiente el espacio urbano, identificar zonas de la ciudad que requieran un desarrollo más acelerado, entre otras cosas, como ya lo mencionamos para lograr estos fines se cuenta con la participación ciudadana por medio de diferentes trámites y obligaciones que se tienen con la autoridad, de ahí la importancia de cumplirlos, no solo para evitar sanciones, sino para ser parte del crecimiento ordenado y exponencial del lugar en que vivimos.
